Para la mayoría de las empresas, su propiedad intelectual es su elemento vital. Es su derecho ser el único beneficiario de sus innovaciones y su arduo trabajo. Sus patentes, marcas comerciales y derechos de autor son lo que hace que su empresa sea única y su objetivo es actuar como escudo contra aquellos que quieran aprovechar su propiedad intelectual para su propio beneficio.
Sin embargo, en el caso de las marcas, en particular, la ejecución de ese escudo protector puede ser excepcionalmente compleja. El simple hecho de poseer el derecho legal sobre una marca no es suficiente para evitar la infracción. En la práctica, la protección de la marca requiere una acción por parte del titular de la misma para ofrecer una verdadera seguridad. Por ejemplo, si no se utiliza una marca durante tres años o más, la ley considerará muchas veces que se ha abandonado el derecho de propiedad intelectual sobre esa marca.
Además, la ley de propiedad intelectual también reconoce un concepto importante conocido como aquiescencia , que requiere que usted tome acciones legales rápidas cuando descubra que alguien ha infringido sus derechos de marca registrada.
Como dijo una vez Edmund Burke: “Lo único necesario para el triunfo del mal es que los hombres buenos no hagan nada”.
El concepto de aquiescencia significa que, si usted permite conscientemente que otra entidad infrinja sus derechos de marca registrada sin tomar medidas durante un período de tiempo significativo, usted ha aceptado legalmente el derecho de esa entidad a usar y beneficiarse de su marca registrada.
La legislación sobre propiedad intelectual considera que la aquiescencia representa un consentimiento activo para usar la marca si usted, como propietario de la marca, afirmó activamente que no emprendería acciones legales, tardó una cantidad de tiempo inexcusable en hacer valer su derecho o reclamo y el cese del uso de la marca por parte del demandado le causaría un perjuicio indebido.
En términos generales, si usted claramente toleró el uso de su marca registrada por otra entidad, es probable que esta pueda utilizar la aquiescencia como defensa para minimizar o eliminar su responsabilidad si usted reclama una infracción, lo que significa que no podrá cobrar daños ni impedir el uso de su marca registrada.
Por lo tanto, es fundamental que actúe con rapidez si alguna vez sospecha o descubre el robo o uso ilícito de su propiedad intelectual. La inacción deliberada puede dar lugar a la pérdida de su derecho a emprender acciones para proteger sus derechos.
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