Terminación: ¿legítima, injusta o ninguna de las dos? ¿Y cuáles son sus implicaciones?

Posted on Abr 12, 2016 by Conrad Saam

Durante el transcurso de una sociedad pueden ocurrir muchos eventos imprevistos. Algunos de estos eventos pueden llevar en última instancia a la disociación de un socio o la disolución de la sociedad. La disociación de un socio o la disolución de una sociedad tiene enormes ramificaciones. Aún más importante es si dichas acciones se realizaron de manera correcta, incorrecta o ninguna de las dos, ya que esa clasificación tiene un impacto instantáneo en los socios. Es importante comprender y reconocer la diferencia.

El tipo de disolución más beneficioso es la disolución legítima. Esta ocurre cuando la disolución se realiza sin violar el acuerdo entre los socios. Por ejemplo, si la sociedad tiene un plazo definido, la sociedad no se disuelve dentro de ese plazo. La disolución legítima puede ocurrir, por ejemplo, por la voluntad expresa de cualquier socio en una sociedad a voluntad, o por la voluntad expresa de todos los socios que no hayan tenido sus intereses asignados o los hayan tenido asignados a una orden de gravamen. Hay muy pocas ramificaciones entre los derechos entre los socios en una disolución legítima.

El siguiente tipo de disolución es la disolución ilícita. Se produce cuando la disolución se produce en contravención del acuerdo entre los socios. Por ejemplo, ocurre cuando la disolución se produce por la voluntad expresa de cualquiera de los socios en cualquier momento en que las circunstancias no permitan la disolución. La importancia de la disolución ilícita es que si el socio que causa la disolución ilícita causa daños, debe pagar daños y otras sanciones a los socios que no se disuelven. Si la sociedad se vende, no puede participar en ningún fondo de comercio.

Por último, la rescisión no es ni legítima ni ilícita en determinadas circunstancias. Por ejemplo, si algún acontecimiento hace que sea ilegal continuar con el negocio de la sociedad y esta debe disolverse, no es ilícita ni ilícita. Si un socio muere y la sociedad no puede continuar debido al contrato de sociedad o a la ley aplicable, la disolución no será ilícita ni ilícita. La disolución tampoco será ilícita ni ilícita si se emite un decreto del tribunal disolviendo la sociedad.

Existen tres tipos diferentes de disolución: legítima, ilícita y ninguna de las dos, cuyas consecuencias pueden ser drásticas. Si un socio causó una disolución ilícita, puede estar en deuda con la sociedad por los daños causados. Por lo tanto, es importante descifrar si las acciones que causaron la disolución de una sociedad son legítimas o ilícitas. Consultar con el equipo legal adecuado puede ayudar a determinar exactamente eso. Llame al bufete de abogados Trembly al (305) 614-8137 hoy para programar su consulta.

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